Hoy en día llevamos una vida ocupada, los padres trabajan, los niños prefieren los videojuegos o la computadora y no siempre nos sentimos a cómodos llevando a nuestros pequeños a los parques que la ciudad ofrece debido a la inseguridad ciudadana, sin embargo el juego al aire libre es muy importante en el desarrollo infantil y merece que hagamos el esfuerzo.
Los expertos recomiendan que el niño realice al menos una hora diaria de actividad física al aire libre, las ventajas bien justifican que tomemos esta sugerencia en serio ya que los efectos positivos no son solo físicos e incluyen impulsar la autonomía en el niño, fomentar su creatividad y beneficiar sus relaciones sociales.
Los paseos al aire libre son muy importantes para los recién nacidos, su piel necesita el estímulo e la luz solar para sintetizar la vitamina D, que luego le ayudará a asimilar el calcio en sus huesos, naturalmente hay que considerar los horarios más convenientes y abrigarlo apropiadamente, no se trata de exponerlos a corrientes de aire que puedan enfermarlo ni tampoco de exponerlo directamente al sol en verano, sino de permitir que se vaya habituando al exterior.
A medida que el niño crece el contacto con la naturaleza le permitirá estimular todos sus sentidos a través de diferentes texturas, sonidos, olores, temperaturas, etc. lo cual es beneficioso para su creatividad. Incluso espacios de juego armados como los que ofrecen por ejemplo algunos restaurantes de comida, muy de moda hoy en día, pueden resultar insuficientes o demasiado estructurados, procure que el contacto con la naturaleza sea real, no importa si es en el jardín de su propia casa, en un espacio pequeño podrán aprender mucho si este cuenta con suficientes estímulos.
Podemos recurrir a elementos de juego muy sencillos, desde pelotas, carpas, globos, cometas, cajas de arena o incluso figuras pintadas con tiza en el piso, hasta otros más elaborados como bicicletas, carritos a pedal, columpios, carruseles o juguetes de agua, recuerde que la capacidad de asombro de los niños es mayor, no hay excusa a la hora de jugar.
Una ventaja adicional de la actividad física al aire libre es la mejora del estado de ánimo de los niños, el ejercicio ocasiona que el cuerpo libere endorfinas, un químico natural producido en la glándula pituitaria asociado a la felicidad, que combate además la ansiedad.
Por supuesto la actividad física ayuda a que los niños se cansen y puedan dormir mejor por la noche, pero no abuse de la actividad aeróbica como correr largas distancias, deles rienda suelta, no planifique rutinas de ejercicios como si se tratara de un gimnasio o una sesión de entrenamiento competitivo, recuerde que la idea no es agotarlos sino posibilitar un desgaste físico moderado a la par del descubrimiento de aspectos como el equilibrio y la estimulación de los sentidos.
La vida moderna conspira cada día contra el juego al aire libre, produciendo una cantidad alarmante de niños y jóvenes presas del sedentarismo y el sobrepeso, con los riesgos para la salud que esto implica, así que no lo olvide, con una selección de juguetes tradicionales, sol, aire fresco, y sobre todo un buen ejemplo, puede ayudar a que su pequeño aproveche al máximo su tiempo de contacto con la naturaleza.
Por último no olvide que en Rosario Centro de Compras encontrará ropa adecuada para la actividad al aire libre de sus pequeños, le dejamos uno de los videos de la campaña Vamos a Jugar Afuera de la marca Kyly, en la que Carlitos nos cuenta que es el más nuevo de su grupo y ya saltó un muro, se subió a un árbol, hizo 5 goles en un partido, escapó de un perro, rio, lloró, ganó, perdió, corrió bajo la lluvia y ahora aprendió a…(ver video)